petardos

PERROS Y PETARDOS

El sonido de los petardos puede ser aterrador para muchos perros. 

Sus oídos sensibles captan los ruidos fuertes y repentinos, lo que puede causarles ansiedad y estrés.

A nosotros mismos, cuando suena un petardo o una traca y nos pilla por sorpresa también podemos tener una reacción de miedo, imaginaros eso escuchandolo 10 veces más y sin saber que realmente es una traca o un petardo, posiblemente nos asustáramos mucho más. 

En Valencia, a parte de la época de fallas que evidentemente son entre 15 y 20 días de petardos, tracas, mascletás y castillos nocturnos continuos y que afecta mucho a los perros, durante todo el año son muchas las ocasiones en las que se siguen utilizando los efectos pirotécnicos, ya sea por la celebración de un festejo, un gol, o cualquier evento…

A continuación, vamos a recomendar algunas estrategias para ayudar a los perros a gestionar este miedo de la mejor manera posible.

 

Crear un refugio o zona segura.

Proporciona a tu perro un lugar seguro y cómodo donde pueda esconderse cuando comiencen los petardos. 

Bajar las persianas al máximo, cerrar ventanas todo lo herméticamente posible, para amortiguar y aislar al máximo los ruidos, sería el primer paso para ayudarle a reducir la potencia con la que se oirán los petardos.

El uso de luces tenues también puede ayudarles, hay perros que quizás con la oscuridad lo lleven mejor o peor, pero una luz tenue relajante sería una buena opción.

Pon su cama, mantas, bebederos y demás utensilios que suela usar para su descanso en la habitación más alejada o aislada de los ruidos, normalmente los baños o habitaciones interiores suelen ser las más alejadas de las ventanas.

Puede ser una habitación tranquila de la casa, un transportín o una cama cómoda en una esquina o debajo de la mesa, según lo que vuestro perro os indique. 

Puede que un perro prefiera estar en el baño y otro en su transportín o debajo de la mesa de la cocina, a cada cual, lo que le aporte más seguridad, y debe de tener la posibilidad de elegir y no ser nosotros el que le forcemos a estar en una zona si realmente no es la que al perro le resulta la más segura.

Siempre tiene que tener la posibilidad de poder salir y entrar de este entorno seguro, es decir; no cerraremos la puerta del baño o del transportín ( por poner un ejemplo ) para que pueda tener opción de salir si lo necesita.

Asegúrate de que este espacio esté alejado del ruido tanto como sea posible.

 

Usa ruido blanco o música relajante

El ruido blanco o la música suave pueden ayudar a amortiguar los sonidos de los petardos. 

Hay muchos estudios que aseguran que el uso de música adecuada puede ayudar a los perros a bajar sus niveles de estrés.

Hay listas de reproducción y aplicaciones específicas diseñadas para calmar a los perros. También puedes dejar la televisión o la radio encendidas a un volumen bajo.

En un directo que hicimos varios educadores caninos sobre este tema, un consejo fue que durante todo el año podríamos habituar a los perros a la música rock/heavy en los que el uso de batería es muy frecuente, para que cuando llegan estos episodios de petardos, al usar esta música y el perro ya estar habituado, puede que los golpes de batería de este tipo de música en un volumen alto pueden disimular los efectos sonoros de los petardos.

La música clásica es también muy utilizada, música usada para el yoga o retiros espirituales, aquí habría que ver cual es la que más beneficios le aporta a nuestro perro en particular, recordar que cada perro es distinto y lo que le puede funcionar a un perro puede no servirle a otro.

 

Mantén la calma y sé un buen ejemplo

Los perros son muy perceptivos y pueden captar el estrés y la ansiedad de sus dueños. Trata de mantener la calma y actuar con normalidad.

Aportar calma, permanecer a su lado de manera tranquila puede ayudarle.

Si a tu perro, le calma hablarle en un tono tranquilo y reconfortante o acariciarle hace que se relaje no dudes en hacerlo.

 

Paseos y juegos mentales

Hacer algún paseo antes de las horas de los efectos pirotécnicos sería también algo a tener en cuenta, en estos paseos debería de tener la posibilidad de ejercitarse si es necesario, tanto físicamente como mentalmente.

Si por ejemplo, podemos ir a la playa o a un entorno lo más natural posible para que cubra sus necesidades, haga el deporte físico que le apetezca y acabamos la actividad con un paseo en el que pueda dedicarse a olfatear para llegara casa lo más relajado posible, le ayudará posiblemente a hacer una mejor gestión del el episodio de miedo que aparecerá en un futuro.

Juegos de olfato, rompecabezas para perros y sesiones de enriquecimiento ambiental, pistas de confianza en casa, antes de estos episodios de ruidos por petardos también pueden ayudar.

 

Productos Calmantes

Existen productos en el mercado diseñados para calmar a los perros durante situaciones estresantes, como chalecos de presión, feromonas y suplementos naturales.

Los chalecos de presión, como el Thundershirt, aplican una presión suave y constante que puede tener un efecto calmante.

Complementos nutricionales como CBD, triptófano, valeriana, pasiflora.

Snacks naturales adaptados a sus características (tamaño, dureza..) también puede ayudarles a reconducir esos momentos tan estresantes, siempre y cuando el perro no se vea muy bloqueado por sus miedos, pero darle la opción de usarlos sería una herramienta más

Las feromonas, disponibles en difusores o collares, imitan las sustancias naturales que producen las madres para calmar a sus cachorros.

Aceites esenciales como lavanda, geranio, frankincense, ylang-ylang son algunos de los muchos que se pueden utilizar.

En todos estos casos, lo ideal es consultar antes con un veterinario, etólogo o especialista en este campo en particular.

 

Evita la exposición directa

Durante eventos donde se espera el uso de petardos, como fiestas o celebraciones, intenta mantener a tu perro en casa, evitar sacarlo a pasear a esas horas y no dejarlo solo en casa.

Poder salir de la zona e ir a un entorno alejado lo más natural posible en el que el perro no escuche o haga una buena gestión de los petardos sería lo ideal. 

 

Desensibilización y contracondicionamiento

Este es un enfoque a largo plazo que puede ayudar a reducir el miedo de tu perro a los petardos. 

Consiste en exponer gradualmente a tu perro a sonidos de petardos a un volumen bajo mientras le das premios y elogios. A medida que tu perro se acostumbra al sonido, puedes aumentar gradualmente el volumen. 

Este proceso debe hacerse de manera gradual y con paciencia. Si desde que llega un cachorro a casa, trabajamos esto diariamente, posiblemente en épocas de espectáculos pirotécnicos el perro tendría mucho menos miedo.

No hay que acordarse del problema cuando ya lo tenemos encima, habría que trabajarlo durante todo el año para poder ayudarles realmente de la manera más eficaz.

 

Consulta con un veterinario o etólogo

Si el miedo de tu perro a los petardos es extremo, puede ser útil hablar con tu veterinario. Ellos pueden recomendar medicamentos ansiolíticos para ayudar a tu perro a sobrellevar los momentos de mayor estrés.

 

En definitiva

Ayudar a tu perro a enfrentar el miedo a los petardos requiere tiempo, paciencia y una combinación de estrategias.

Entender el miedo de tu perro y actuar de manera proactiva puede hacer una gran diferencia en su bienestar durante estos momentos estresantes. 

Con tu apoyo y las herramientas adecuadas, puedes ayudar a tu perro a sentirse más seguro y tranquilo cuando aparecen los temidos petardos.

 

¡Cualquier duda, puedes ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de intentar ayudarte!

estrés

ESTRÉS CANINO

LOS PERROS TAMBIÉN TIENEN ESTRÉS.

Teniendo en cuenta que el sistema nervioso del perro es más de un 90% compatible con el nuestro, no es difícil entender que los perros para vivir, al igual que los humanos, necesitan el estrés y el miedo.

El estrés al igual que el miedo, ya sea en perros o humanos, no se puede calificar ni de bueno ni de malo, es necesario. Lo que no es bueno es el exceso de estrés y/o de miedo. Por lo que podemos considerar normal tener miedo a un perro que ofrece conductas agresivas pero no a cualquier perro aunque pese 2 kilos y su conducta sea dócil y calmada.

Del mismo modo podemos considerar normal que a un perro le estresa en cierta medida una visita en casa, lo que no sería tan normal sería el hecho de que el perro no pudiera gestionar bien esa visita y diera señales de estrés y malestar llegando incluso a generar problemas en la familia o al propio invitado.

Lo contrario a un perro estresado o con estrés es un perro tranquilo y en calma. Normalmente, a los educadores caninos nos requieren porque los familiares observan conductas que le aportan problemas al perro y a la familia. Conductas que no vienen porque el perro es dominante, malo o “chulo”.

Son conductas cuyo origen está en el estrés y el miedo: Ladridos excesivos, conductas agresivas hacia perros o personas, destrozos en casa, micciones no deseadas en el hogar, el perro tira mucho de la correa, el perro lleva muy mal las visitas en casa, el perro no obedece y muchos más ejemplos de los que podemos observar que el perro no está en calma y le cuesta gestionar el estrés generado por la situación.

Por lo tanto, la mayoría de los problemas que se suelen dar en la convivencia tienen su origen en el estrés, que es exactamente lo contrario a la calma y la tranquilidad. 

SEÑALES DE ESTRÉS:

  • No poder parar quieto
  • Imposibilidad de tumbarse
  • Mordisquear cosas
  • Transportar cosas con la boca
  • Jadeo
  • Rascarse. Picores.
  • La monta
  • Sacudirse
  • Hipersalivar
  • Revolcarse por el suelo
  • Bostezar
  • Saltar en vertical
  • Llanto
  • Retropiloerección

Puedes observar si un perro está estresado porque da señales. Estas señales deben de saber interpretarse pues no siempre que un perro se rasca o se sacude es por estrés. Si atendemos al entorno y la situación que está viviendo podremos saber perfectamente si se tratan de señales de estrés.

 

DOS TIPOS DE ESTRÉS: “POSITIVO” Y “NEGATIVO”.

Podemos considerar para entenderlo mejor que hay dos tipos de estrés, uno que parte del malestar (al que podemos denominar negativo) y otro que parte de la felicidad y la alegría (al que podemos denominar positivo). Lo importante es saber que los dos generan estrés.

De este modo, cuando llegamos a casa o le tiramos la pelota al perro para que juegue, estamos generando estrés “positivo”. Y si por el contrario, nos enfadásemos con el perro o quisiera comer algo que no le dejásemos, estaríamos generando estrés negativo, ya que el perro se sentiría frustrado e incomprendido.

Es muy común que las personas entendamos que el estrés “negativo” es malo para el bienestar del perro, pero cuesta más entender que el estrés “positivo” también puede traer problemas de bienestar al perro, problemas de salud y problemas de convivencia con la familia.

 

EL ESTRÉS ES SUBJETIVO Y PERSONAL. 

La gestión que cada individuo hace del estrés es subjetiva y personal, es decir; una misma cosa puede estresar mucho a una persona y poco a otra. 

Lo mismo pasa con el miedo. A alguien puede darle miedo algo que a otra persona no. 

Los perros también gestionan el estrés de forma individual, de modo que puedes ver como hay perros que una determinada cosa les sienta muy mal y les estresa mucho y a otros no tanto. 

Un ejemplo serían las correcciones o el hecho de no darle acceso a otro perro con el que quiere relacionarse o saludar. 

Entonces, si el estrés es subjetivo y personal, ¿Nosotros como tutores tenemos alguna responsabilidad sobre sus niveles de estrés?

Por supuesto, pues sus niveles de estrés dependen de dos cosas: la vida que le demos al perro y cómo la gestione.

 Puedes darle exactamente la misma vida a dos perros, con la misma familia, el mismo hogar, las mismas rutinas, etc… Y que uno de los perros no presente señales de estrés y el otro perro presente muchas señales de forma diaria. 

Si la gestión que hace el perro del estrés es subjetiva y personal, dependerá de la vida que le ofrezcamos nosotros que tenga niveles de estrés más altos o más bajos. 

Un perro estresado piensa peor, escucha peor, obedece menos, ve más amenazas donde no las hay y puede disparar sus conductas instintivas con más facilidad. Y a la larga puede afectar a su sistema digestivo, a la piel o incluso dañar el sistema inmunológico del perro. 

Un perro con niveles de estrés bajos es todo lo contrario, entiende mejor, gestiona mejor las cosas, escucha mejor, se siente más seguro, se comunica mejor, ladra menos y está más sano.

 

¿CÓMO FUNCIONA EL ESTRÉS?

Es importante entender que el estrés SE ACUMULA COMO UNA MOCHILA QUE SE VA CARGANDO DE PESO y cuanto más pesa peor, más problemas tienen los perros. Pero además en ocasiones se “DISPARA” EN FORMA DE PICOS DE ESTRÉS.

Muchos picos de estrés en el día a día del perro pueden llevarlo a una acumulación de estrés, al igual que una vida sin necesidades bien cubiertas. Es esta “mochila” la que puede llevar al perro a un problema más grave de salud emocional y física, haciendo llegar al perro a lo que se denomina ESTRÉS CRÓNICO.

Las señales de estrés crónico pueden ser problemas de piel, problemas gastrointestinales, coprofagia, estereotipias, reactividad, hiperactividad, indefensión aprendida… 

Llegados a este punto es vital acudir a un etólogo veterinario para ayudar al perro a lidiar con su día a día y tratar de mejorar su salud y bienestar.

 

MECANISMOS QUE INTERVIENEN EN EL ESTRÉS CUANDO EL PERRO SE ESTRESA.

Ritmo cardíaco disparado, glóbulos rojos concentrándose en los músculos, aporte de adrenalina, aporte de testosterona, aporte de osteocalcina, aporte de dopamina, a largo plazo aumento de los niveles de cortisol y más cambios a nivel químico que aportan mucha energía al perro y reduce la capacidad de razonar del perro.

 

¿CÓMO REDUCIR LOS NIVELES DE ESTRÉS DE MI PERRO?

Podríamos resumir en una frase que reducir los niveles de estrés del perro es cubrir bien sus necesidades y evitar cosas que le alteren ya sea en cantidad o en intensidad, ya sea para bien o para mal. 

Además, habría que tener en cuenta la personalidad del individuo, los hay más sociables, más inseguros, más juguetones… Pero para entenderlo mejor a continuación vamos a exponer cómo podemos reducir los niveles de estrés del perro tanto en casa como en la calle:

– Rutina diaria adecuada y salir de la rutina de vez en cuando, a la naturaleza, bosque, montaña, playa, etc. Pueden ser de tres paseos al día aproximadamente de un total de una hora u hora y media aproximadamente, fuera de casa. Si un perro tiene problemas en la calle debería tener mucho descanso entre bajada y bajada y poco tiempo de exposición.

– Ambiente tranquilo en casa, movimientos lentos, volumen bajo, evitamos discusiones. Llegadas y salidas tranquilas.

– Modelo educacional amable y respetuoso; Dejamos las correcciones de lado y utilizamos la forma más amable de pedirle que deje de hacer algo si es que tiene que dejar de hacerlo. Convivencia libre de estrés y miedo. Utilizamos la palabra NO lo justo y necesario, no la utilizamos a diario. Si no la usamos mejor.

-Enriquecimiento ambiental adecuado y juguetes como alfombra olfativa, cuerda, peluches, juego de olfato en casa, kong con paté, cilindro con agujeros y premios, etc… Ambientador de lavanda les relaja y la vainilla evita ladridos, también pueden funcionar hormonas de apaciguamiento. Los snacks naturales deshidratados les gustan, desestresan y enriquecen. La música de piano tranquila les relaja mucho.

-Alimentación variada y de calidad y descanso de calidad y en cantidad. Esto es vital.

-Nivel de exigencia justo y necesario para su edad y su realidad; le pedimos lo que realmente necesitamos si puedo darlo. No le pidamos cosas que no necesitamos, se frustran y deterioran nuestra relación.

-Ejercicio físico y mental; es más importante el mental, solamente con dejar que olfatee lo que quiera y fomentar el olfato en los paseos llegará más cansado y relajado a casa que si se pone a correr. Sobre todo en entornos nuevos. El ejercicio inducido no es buena opción, así que nada de lanzarle cosas. Para que se ejercite debemos soltarlo y  hará el ejercicio que necesite especialmente si hay más perros. Cuidado y cabeza.

Si no podemos, no lo hacemos, siempre podemos buscar zonas seguras, valladas, ponerle una correa de 10 metros, un cordino de 15 o 20 metros y trabajar poco a poco. Cuidado con el nivel de excitación de los vallados, no es el mejor sitio para que un perro socialice.

-Paseos de calidad, que cubra sus necesidades, con buen manejo de correa adecuada mínimo de tres a cinco metros, vamos donde quiera ir siempre que no se meta en líos, le colocamos un arnés adecuado. Hacemos buen uso y manejo de correa que se perfecciona con el tiempo. Fomentamos la calma en los paseos y nuestra referencia siempre de calma. E intentamos darle movimiento al paseo, evitamos quedarnos parados mucho tiempo, a no ser que lo pida o lo necesite.  También se pueden hacer paradas de calma y observación del entorno.

Los paseos de calidad deben tener: libertad de movimiento y pensamiento, referencia de calma por nuestra parte, el mayor silencio posible, buen manejo de correa, material de paseo adecuado, mantenernos en un segundo o tercer plano, darle independencia, entornos adecuados, posibilidad de ejercitarse, olfatear y relacionarse con el entorno y otros perros.

– Socialización: A ser posible sin correa y en entornos adecuados y con perros sin graves problemas de conducta. Tenemos que darle la oportunidad a diario de socializar si quiere.

-Buena comunicación, le hablamos lo necesario, en tono tranquilo y amable, nada de excitarlo o regañarlo. Interacción sin excesos que es lo habitual y aprendemos y respetamos las señales de calma y advertencia. 

-Respecto al juego debemos entender que prácticamente va unido al estrés, jugar es emocionante y divertido y puede alterar bastante al perro por lo que recomendamos jugar en intensidad baja como lo haría un perro adulto y maduro. 

– Evitamos la soledad en la medida de lo posible. Y en ocasiones elegimos el mal menor porque es preferible dejar al perro en casa que enfrentarlo a un entorno que lo va a estresar o no va a gestionar bien por no estar preparado.

– Contacto de calidad y cariño. Lo que nos pida y le guste recibir. El contacto y el cariño no implica movimiento y las caricias si. Atendemos a sus acercamientos o a su comunicación para ver si le gusta. La caricia perfecta debe ser previsible, permitida, placentera y productiva. 

– Las visitas al veterinario o a la peluquería canina pueden estresar mucho al perro. Los vallados con niveles de excitación altos también. Cuidado con el espacio, los tiempos y los perros que hay dentro.

-Y por supuesto, proteger al perro de todo aquello que le da miedo en exceso.

Además existen terapias complementarias que pueden ayudar al perro a reducir sus niveles de estrés: Masajes, suplementos naturales, juegos de olfato, camisas anti estrés, hormonas de apaciguamiento, musicoterapia, flores de Bach, aromaterapia con aceites esenciales…

Como profesionales de la educación canina y asesores tratamos muchos casos en los que el perro ofrece conductas que preocupan o dificultan la convivencia familiar. 

Sea cual sea el problema, el mejor principio para ayudarles es proponer un buen plan de reducción de los niveles de estrés del perro. 

Esto hace que el perro en cuestión de tiempo, esté más tranquilo generalmente y de forma cotidiana, esté más sano física y mentalmente, que escuche mejor, que obedezca mejor, y que muchas conductas que complican la convivencia en el hogar o en la calle se reduzcan considerablemente o incluso desaparezcan. 

¡Cualquier duda, puedes ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de intentar ayudarte!

perros y niños

PERROS Y NIÑOS

Son muchas las familias en las que conviven perros y niños, y si la cosas se hacen bien puede ser una experiencia muy bonita, pero en otros casos, la experiencia puede complicarse ya que es un gran cambio para todos.

Vamos a abordar como deberíamos de preparar a nuestro perro de la manera más amable y respetuosa ante la llegada de un bebe al hogar, ya que sin duda, hacer una buena transición en los cambios que van a suceder ayudará a nuestro perro a hacer una mejor gestión de estos cambios.

También hablaremos de como sería la mejor manera de una primera presentación entre perros y niños.

Durante el embarazo se pueden ir preparando muy progresivamente todas esas rutinas y cambios que se prevén, preparar nuevas estrategias para poder cubrir sus necesidades, para que sea un proceso totalmente natural.

Los tiempos y la calidad de los paseos suelen cambiar, las rutinas también suelen verse afectadas, así como sus posibilidades de socialización, los tiempos de descansos y la calidad de estos, nuevas limitaciones.. y este cúmulo de cambios acaban por desencadenar esos cambios en su comportamiento.

Los perros son muy sensibles a los cambios en su entorno y en sus rutinas.

 

CAMBIOS EN LAS RUTINAS

Lo primero que deberían de pensar los tutores es en los cambios que van a suceder en sus rutinas y en la del perro para habituarse progresivamente.

Los bebés alteran significativamente las rutinas diarias. Si el perro está acostumbrado a un horario estricto para paseos y comidas, empieza a variar los horarios gradualmente para que se acostumbre a la flexibilidad.

Posiblemente cambien los horarios de paseos, y de quién realiza los paseos, porque si la mamá tiene que estar en casa con el bebé durante la lactancia posiblemente sea el papá o la otra persona la que tenga que ocuparse de los paseos del perro.

Estos cambios en las rutinas de paseos deberían de ir dándose de manera gradual para que luego no sea algo que al perro le pueda crear confusión.

 

CAMBIOS EN  ZONAS DE LA CASA

También hay que valorar si vamos a cambiar zonas de uso restringido para el niño, deberíamos de ir habituando al perro a dejar de usar esas zonas de manera progresiva.

De la misma manera, habría que proporcionar un lugar tranquilo donde el perro pueda retirarse si necesita un descanso. Este debe ser un espacio donde se sienta seguro y no sea molestado.  

Al igual que puede haber una zona para el descanso del niño y que en ciertos momentos puede que no se le permita entrar al perro, a la inversa tambien deberia de darse; una zona en la que el perro pueda estar tranquilo sin la posibilidad de que el niño pueda entrar, sobre todo si no hay una supervisión de los tutores.

PRESENTACIÓN ENTRE PERROS Y NIÑOS

El primer encuentro entre perros y niños debería de ser de manera natural, en un entorno tranquilo y controlado.

Las personas no deberían sobreexcitar al perro para que este pueda asociar la presencia del niño con algo tranquilo, permitiendo acercarse y olerle.

Observar cuidadosamente las reacciones de los perros y niños y reforzar los comportamientos tranquilos y curiosos.

Fomentar momentos de descanso y de calma entre ambos, ayudarán a normalizar y mejorar el vínculo.

Nunca habría que dejar solos a los perros y niños sin supervisión.

 

TIEMPO Y ATENCIÓN

En muchos casos, suele darse que, antes de la llegada del niño, el perro es el centro de atención de las personas, todo gira en torno a él y de repente, en cuanto llega el nuevo miembro esta atención y el tiempo que se les proporciona cambia totalmente.

El tiempo que se le puede ofrecer a los perros cambia considerablemente, en muchas ocasiones disminuye y casi siempre en presencia de otro ser vivo, en este caso el bebe y que también reclama atención.

La atención recibida ya no es la misma y cuando se le da, casi siempre está presente el niño, y eso puede llegar a ser frustrante para el perro si no se le ha ido habituando de manera progresiva.

Sería muy positivo poder mantener ciertas rutinas en las que el perro pueda recibir atención, paseos, juegos, momentos de contacto y descanso en las que el protagonista sea él también, para que no se sienta desplazado y con la frustración que esto le puede generar. 

Fomentar experiencias de calidad y poco estresantes como paseos tranquilos, siestas entre perros y niños sería una buena manera de reforzar el vínculo y el respeto entre ellos.

 

SUPERVISIÓN ENTRE PERROS Y NIÑOS

La mayor tasa de agresividad se da en perros y niños y eso se entiende teniendo en cuenta que los bebés a medida que crecen y empiezan a gatear y tienen más autonomía son mucho más intensos, invasivos y estresantes para los perros.

Todos estos comportamientos se traducen en perros mucho más estresados, con peor gestión emocional y si no hay una buena supervisión, puede acabar en una agresividad de los perros hacia los niños.

Hay que explicar a los niños que los perros no son un juguete y que debemos de respetar sus espacios, evitar la sobreestimulación y fijarse en su lenguaje corporal para saber si estamos siendo molestos.

 

LLEGADA DE UN PERRO A UNA CASA CON NIÑOS

En el caso de que sea un perro el que llega a una nueva familia en la que hay niños, lo primero sería hacerles entender a los niños que el cambio que supone para el perro llegar a un entorno nuevo con personas nuevas va a ser bastante estresante.

Los primeros días solo deberíamos de preocuparnos de que el perro haga una asociación de que tanto las personas como los niños no son un peligro, por lo tanto hay que dejarle tranquilo y fomentar mucha calma y promover momentos de descanso y tranquilidad.

Eduquemos a los niños en el respeto hacia los perros. Serán mejores personas, los perros serán más felices y habrán muchos menos «accidentes» indeseados.

 

CONCLUSIÓN

La adaptación para una buena relación entre perros y niños es un proceso gradual. 

Darle tiempo al perro para que se acostumbre al nuevo miembro de la familia es crucial. 

Algunos perros pueden necesitar más tiempo que otros para adaptarse completamente.

La llegada de un bebé a un hogar con un perro puede manejarse de manera exitosa con planificación, paciencia y respeto. 

Al preparar adecuadamente al perro y proporcionar un ambiente seguro y controlado, es posible fomentar una relación armoniosa entre los perros y niños, asegurando el bienestar de toda la familia.

La llegada del nuevo miembro de la familia no debería de generar ningún problema a nuestro perro, sino todo lo contrario, una implementación de la felicidad como parte de la unidad familiar.

Con buenas pautas, respeto y empatia se puede conseguir una buena relación entre perros y niños.

¡Cualquier duda, puedes ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de intentar ayudarte!

juegos

EL FASCINANTE MUNDO DE LOS JUEGOS EN LOS PERROS

Los juegos son una de las principales actividades que hace la familia cuando un cachorro llega a casa.

Se le enseña mediante el juego a obedecer; a sentarse, a darnos la pata, a tumbarse…, también se juega a perseguir una pelota o a tirar de una cuerda, es decir; lo primero que suele hacer la familia cuando llega un perro joven a casa es jugar con él. 

El juego está pensado para crear situaciones con el fin de proporcionar entretenimiento y diversión, lo que no se suele tener en cuenta es si estos juegos que realizamos con los perros realmente son buenos o malos.

Por mucho que veamos que el perro se está divirtiendo, no tiene por qué acabar siendo beneficioso para él.

Un claro ejemplo de esto podría ser una persona que está jugando en un bar a una máquina tragamonedas. 

Posiblemente se esté divirtiendo y pasando un buen rato pero quizás ese juego no sea el mejor ya que en muchos casos puede acabar en una adicción.

Por eso se legisla sobre las salas recreativas cerca de colegios, ya que estos juegos en edades tempranas pueden crear muchos problemas futuros de adicción al juego.

Algo parecido puede pasar con los juegos en los perros jóvenes a edades tempranas, según qué juegos, pueden ser ,a la larga, más problemáticos que beneficiosos.

 

JUEGOS FÍSICOS VS JUEGOS MENTALES

En muchas ocasiones cuando vamos a casas a ver a clientes, vemos a perros altamente activos, muy nerviosos y que les cuesta mucho relajarse.

Esto suele suceder porque cuando el perro es joven la familia intenta cansar al perro mediante el juego físico para que acabe “relajado” (realmente se le está agotando físicamente ) y les deje tranquilos.

Normalmente, el perro se pasa horas solo en casa debido a que la familia está trabajando y estas horas de ausencia los tutores las quieren compensar con experiencias muy intensas y estresantes.

Nada más llegar a casa, los tutores quieren aprovechar el tiempo perdido y ofrecen actividades muy estimulantes como irse a correr o en bici, bajar a tirar un rato la pelota, piedras o palos para que corra o al parque un buen rato para que juegue al máximo posible. 

Al intentar cansar a un perro joven conseguimos que su nivel de adaptación a esta carga de juego físico sea muy rápida y por lo tanto con el tiempo necesitará más juego físico para llegar al punto de estar agotado físicamente.

Realmente no estamos consiguiendo un perro tranquilo y relajado, estamos consiguiendo un perro agotado y cuando ha descansado lo suficiente el perro sigue estando igual de activo que cuando empezamos a hacer los juegos.

Una persona puede ir al gimnasio y estar una hora corriendo o incluso dos o tres según su entrenamiento, pero a los pocos minutos de hacer esta actividad física lo normal es que la persona sude porque es una actividad agotadora para el cuerpo.

Sin embargo esta misma persona puede estar concentrada en el trabajo durante dos o tres horas y puede que haya un desgaste mental, pero jamás llegará al mismo nivel de agotamiento que si estuviera en el gimnasio.

Esto sucede porque las personas estamos más adaptados para el trabajo mental y no tanto para el trabajo físico; nos agota más correr que pensar.

En los perros es justo al contrario, se adaptan mejor y gestionan mejor el trabajo físico que el trabajo mental; les agota antes y les deja más relajados pensar que correr.

Cuando un perro se concentra mediante juegos de estimulación mental o de olfateo durante 15-20 minutos puede equivaler a una hora de juego físico. 

Con todo esto no queremos decir que el perro no debe hacer ejercicio físico, lo que intentamos aclarar es que no por querer cansar al perro joven vamos a conseguir un perro tranquilo.

A la larga solo conseguiremos un perro que cada vez necesite mucho más ejercicio, se hará más nervioso y tardará mucho más tiempo en llegar a agotarse.

Los perros deben de tener la oportunidad de poder ejercitarse cada día a su ritmo sin ser nosotros los que induzcan al perro a correr más y más.

El problema de jugar con los perros con este tipo de juegos tan estresantes y tan intensos es que el perro se acaba estresando por lo tanto tarda más en relajarse y puede llegar a casa más nervioso de lo que salió.

 

LA PELOTA (o palo, piedra, frisbee.. )

La pelota es el clásico juego que mucha gente usa con su perro, pero este juego es altamente problemático debido al estrés que le genera y que puede acabar siendo una adicción 

Debido a los grandes niveles de cortisol (hormona responsable del estrés) que se generan en el perro para ir a por la pelota y hacerlo durante varios minutos hace que el cortisol pueda estar horas en su cuerpo.

La persecución constante creará dopamina en su cuerpo y esto a la larga puede desembocar en una adicción con los problemas que esto conlleva.

Se considera que un perro es adicto a este tipo de juegos cuando el perro está en un estado normal y su excitación aparece cuando aparece el juego o simplemente el perro está hiperactivo continuamente esperando el juego.

Este juego nosotros lo desaconsejamos al 99% por no decir al 100%.

 

JUEGOS SOCIALES

Se podría decir que es el juego más importante y el que primero aprenden, ya que, en condiciones normales, lo desarrollarán con sus hermanos y la madre los primeros meses.

En este juego, evidentemente, tienen que interactuar dos o más perros.

Si el cachorro tiene este juego con sus hermanos y madre, a parte de sentir bienestar porque es divertido, será capaz de desarrollar las habilidades necesarias para su futuro.

Podrá empezar a desarrollar las señales de calma y entenderlas, desarrollará sus habilidades motrices y será consciente de sus límites físicos.

Estos juegos de manera natural les ayudará a resolver ciertas experiencias, como una discusión con un hermano por perseguirle y asustarle y luego a hacer las paces, todo esto ayuda a aprender a empatizar.

Un ejemplo sería cuando juegan a perseguirse; el perseguido puede sentir miedo por ser “cazado” y a la hora de hacerlo él, sabrá que el otro también puede asustarse ( él ya estuvo en esa situación ) y ser más cuidadoso.

Todos estos juegos ayudan a crear un vínculo entre ellos y a tener lazos de amistad.

En estos juegos también aprenderán a tener más autocontrol, algo que les ayudará en un futuro con otros perros y situaciones excitantes.

 

JUEGOS EXPLORATORIOS (OLFATEO)

Los juegos de olfateo, pistas de confianza (muy recomendados para perros jóvenes, inseguros o geriátricos ) y los juegos exploratorios son muy divertidos, gratificantes  e importantes para los perros.

Su nariz o trufa es el sentido más desarrollado que tienen, está 60 veces más desarrollado que el nuestro, pueden detectar células cancerígenas (ya se usan en muchos hospitales), también subidas de azúcar en sangre para personas con diabetes, etc.. 

Hacer juegos en los que puedan disfrutar de su trabajo con la nariz hará que el uso de esta sea muy bueno, y que al rato (10-20 minutos ) de concentrarse para los juegos, queden sumamente relajados ya que les ayuda a bajar los niveles de estrés y puede aumentar su autoestima.

Estos juegos tienen que adaptarse a su edad y capacidad de concentración, no se trata de ponérselo muy difícil, sobre todo las primeras veces y cuando son muy jóvenes, ya que podría pasar de un juego agradable a muy frustrante por no poder conseguir realizarlo.

El perro aprende a concentrarse para poder detectar ese olor, y le ayudará también a poder asegurar el entorno donde se realiza el juego ya que mediante la nariz cogerá mucha información.

El entorno donde se hacen estos juegos, sobre todo las primeras veces y siendo jóvenes, tiene que estar muy tranquilo para poder concentrarse.

Estos juegos ayudan a aumentar y mejorar el descanso.

 

JUEGOS COGNITIVOS

Al igual que con los juegos de olfateo, estos juegos de estimulación mental, el uso de la nariz o trufa es muy importante.

En estos juegos, además de concentrarse, tiene que pensar para poder conseguir la recompensa y esto le ayuda a afrontar retos y buscar soluciones para resolverlos.

Estos juegos, al igual que los de olfateo, hay que adaptarlo a la capacidad de cada perro, no tiene el mismo nivel de concentración un perro de 6 meses que uno de 6 años.

En estos juegos como los de olfateo hay que empezar con juegos muy simples para que las primeras veces les sea muy fácil, ganen en confianza y se queden con ganas de más para las siguientes veces.

El entorno donde se hacen estos juegos, sobre todo las primeras veces y siendo jóvenes, tiene que estar muy tranquilo para poder concentrarse.

Estos juegos ayudan a aumentar y mejorar el descanso.

 

En definitiva; hay juegos mejores y peores, no por que el perro esté más contento o excitado son mejores.

No se trata de querer agotar al perro, los juegos deben aportarles aprendizajes útiles y que les ayuden a estar más tranquilos y relajados.

¡Cualquier duda, puedes ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de intentar ayudarte !

pipi en casa

¿POR QUE MI PERRO SE HACE PIPI EN CASA?

Que los perros hagan pipi en casa suele ser un motivo de frustración para los familiares y puede ser motivo de una visita de asesoramiento canino.

Que un cachorro haga pipi en casa es algo totalmente natural y también lo es que poco a poco deje de hacerlo si todo va bien en su día a día.

Lo mismo sucede cuando se van haciendo mayores, es natural que ya no aguanten tanto tiempo sin hacer sus necesidades y puede aumentar el número de micciones en el hogar.

 

Los perros generalmente se hacen pipi en casa por varios motivos

 

POR MOTIVOS FÍSICOS 

  • Se trata de un cachorro o perro anciano y no tiene aguante de vejiga y esfínter. Debemos tener en cuenta que el cachorro aguanta más tiempo con el paso de las semanas. Y el perro anciano tendrá menos aguante que antes.
  • El perro tiene la vejiga llena por cualquier motivo y no puede aguantar más. Puede ser que ese día bebiera más agua de lo normal, porque comió algo distinto o diferente cantidad, porque pasó mucho calor o porque tomó una medicación y la sed fue una consecuencia por ejemplo.

 

POR MOTIVOS EMOCIONALES 

El perro se hace pipi en casa por inseguridad o estrés, ya sea positivo y/o negativo.

Es un perro que tiene niveles de estrés altos en su día a día y eso hace que orine. O tuvo un pico de estrés o frustración y se puso nervioso en un momento dado.

 

POR MOTIVOS COMUNICATIVOS

Suele suceder más cuando el perro convive con otros animales. Pero también contamos con la posibilidad de que el perro piense que los familiares pueden captar los mensajes olfativos que dejan.

Cosas a tener en cuenta.

Si se trata de un cachorro debemos de tener paciencia, tiempo, calma y una rutina de paseos adecuada y paseos adecuados. Eso será lo que acabe con el pipi en casa del cachorro en casa.

Si se trata de un perro joven o un adulto que empezó a hacer pipi en casa lo primero que debemos realizar es una revisión veterinaria y descartar problemas de salud.Lo siguiente una reducción de los niveles de estrés. Buscar factores que puedan estar afectando tanto en casa como en la calle.

Si se trata de un perro anciano: Aumentar el número de paseos, (no hablamos de aumentar los tiempos de exposición en la calle) y colocar empapadores en casa.

No debemos reñir o castigar al perro cuando hace pipi en casa.

En cualquier caso, ya hemos visto que cuando el perro hace pipi en casa generalmente no puede evitarlo.

Si lo pensamos bien, el perro es el único animal en el mundo que tiene que aguantar sus necesidades. Esto obviamente no supone ningún bienestar para el perro pero además, el hecho de tener que hacerlo en casa cuando no quieres hacerlo supone mucho más estrés todavía y si además alguien te riñe por ello no hay forma de mejorar la situación.

Si reñimos a un perro ya sea un cachorro o un adulto por hacer pipi en casa, empeora nuestra relación con él, aumenta su malestar, sus miedos y sus nervios y probablemente los orines. 

 

¿Qué podemos hacer para que el perro no se haga pipi en casa?

 Todo pasa por aumentar el bienestar del perro.

Hemos tratado muchos casos en los que el cachorro mediante una buena rutina de paseos, tiempo y niveles de estrés bajos ha dejado de orinarse en casa antes de los cuatro meses.

Por otro lado, son muchos también los casos que vemos como educadores caninos y asesores en los que perros adultos han vuelto o empezado a orinarse en casa. Tras una revisión veterinaria, es posible reducir el estrés cubriendo mejor sus necesidades o evitando cosas que alteran en exceso al perro.

Cuando estos perros adultos han vuelto a su calma habitual, los pipis en casa por parte del perro han desaparecido para siempre.

 

A continuación comentamos ejemplos de perros adultos que empezaron a hacerse pipi en casa y tras una sesión de asesoramiento canina y detectar los factores que alteraban al perro, desaparecieron para siempre.

  • Chihuahua de 4 años volvió a orinarse en casa cuando el recién nacido de la familia empezó a gatear. Necesitaba más control y sentirse más seguro respecto al niño que hacía días había empezado a moverse por sí mismo con libertad por casa.
  • Labrador de 3 años volvió a orinarse cuando empezaron a dejarle abierto el balcón. Más que servirle de distracción le generaba picos de estrés que se convertían en destrozos y micciones en casa. Fue cerrar la puerta del balcón y darle acceso a una terraza tranquila sin ver perros y se terminaron las micciones indeseadas.
  • Galga de 4 años y medio cambian de domicilio y vuelve a orinarse en casa. En este caso no se puede cambiar el factor que alteró a la perra porque se trata de un domicilio nuevo. Lo que podemos hacer es ayudarle haciéndo la máxima compañia posible en casa y dejándola sola lo mínimo posible durante las primeras semanas. Ayudando a adaptarse al nuevo hogar en tres semanas dejó de orinarse en casa.

 

Ejemplos de perros de cualquier edad que se han orinado en casa exclusivamente en un momento concreto.

  • Perros que se han orinado por miedo durante una tormenta electrica.
  • Perros que se han orinado tras caerse y romperse un vaso de cristal en el suelo.
  • Perros que han orinado al ver como sus tutores se iban y les dejaban en una casa al cuidado de otras personas, ya fueran conocidas o no.

 

Podríamos poner muchos más ejemplos y contar más casos que hemos vivido con nuestros clientes. En el 90% se da el mismo factor, estrés y miedo. Por lo tanto, no tiene ningún sentido reñir o castigar a un perro por esto. Solamente aumentaremos su malestar y alargaremos el problema el tiempo.

En lugar de ello debemos ofrecer a nuestro perro EMPATÍA, AYUDA y TIEMPO.

¡Cualquier duda, puedes ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de intentar ayudarte!

madre y sus cachorros

LA MADRE Y SUS CACHORROS

La edad adecuada para separar a la madre y sus cachorros puede variar según ciertos factores, incluida la especie, la raza y las circunstancias individuales. 

Separar a la madre y sus cachorros es algo que debe de valorarse muy bien, porque como ahora veremos, influye en muchos aspectos y muchos de estos son cruciales para un desarrollo correcto tanto a nivel físico como emocional en los cachorros.

Los primeros meses de vida de un cachorro son críticos para su desarrollo físico, emocional y social.

La imporantancia de no separar a la madre y sus cachorros durante este período juega un papel fundamental en su crecimiento y bienestar. 

En muchas ocasiones, al visitar a clientes y sus respectivos perros, e indagar en la información sobre en que momento se separó a la madre y sus cachorros, en una gran mayoria, los que fueron separados de maner prematura o traumatica, presentan muchos mas problemas a nivel emocional y en sus conductas.

Lamentablemente muchas veces no se puede decidir cuando se va a separar a la madre y sus cachorros, ya que tanto si se adopta o se rescata a algún perro, esto ya ha sucedido.

Normalmente se ha recomendado que la separación de la madre y sus cachorros y sus hermanos entre las 8 y 12 semanas de edad, aunque hoy por hoy y desde nuestro punto de vista, sería recomendable que lo mínimo sería al menos separarlos no antes de las 12 semanas, pudiendo ser beneficioso que pueda estar hasta las 16 semanas.

Aquí hay algunas razones por las cuales se considera este rango de edad como óptimo para separar a la madre y sus cachorros:

  1. Desarrollo social y emocional: Durante las primeras semanas de vida, los cachorros aprenden habilidades sociales cruciales al interactuar con su madre y sus hermanos. Alrededor de las 12 a 16 semanas, los cachorros han tenido suficiente tiempo para aprender estas habilidades básicas, lo que les ayuda a adaptarse más fácilmente a nuevas situaciones y a establecer relaciones positivas con humanos y otros animales.
  1. Destete: A medida que los cachorros crecen, comienzan a alimentarse de alimentos sólidos además de la leche materna. Separar a los cachorros de su madre después de las 8 semanas asegura que estén lo suficientemente desarrollados para comer alimentos sólidos y obtener los nutrientes necesarios para su crecimiento, aunque lo ideal es que se diera un destete proresivo y proporcionar alimentos sólidos, pero no fuera separado de la madre todavía, ya que le queda mucho que aprender.
  1. Independencia: A partir de las 8 semanas, los cachorros comienzan a desarrollar cierta independencia de su madre y están listos para explorar el mundo por su cuenta, de manera muy  progresiva. Esto no quiere decir que no necesiten a su madre, así que al igual que con la alimentación, debería de poder tener la oportunidad de desarrollar su propia identidad y aprender a valerse por sí mismos en ciertos momentos, poco a poco, pero que no fuera separado todavía de la madre

Es importante tener en cuenta que cada cachorro es único y puede haber circunstancias especiales que requieran una separación temprana o tardía de la madre. 

Por ejemplo, si un cachorro está experimentando problemas de salud o si la madre muestra signos de rechazo, puede ser necesario separarlos antes. 

Por otro lado, en casos de socialización deficiente o problemas de comportamiento, puede ser beneficioso permitir que la madre y sus cachorros permanezcan juntos por un período prolongado.

La presencia de la madre durante los primeros meses de vida de los cachorros es crucial para su desarrollo físico, emocional y social. 

Sin embargo, es importante encontrar un equilibrio para evitar una dependencia excesiva y garantizar una adecuada socialización con los humanos. 

Los criadores y tutores deben considerar cuidadosamente las necesidades individuales de cada cachorro para garantizar un crecimiento saludable y feliz.

A continuación, valoraremos los ventajas y desventajas de la separación de la madre y sus cachorros:

Ventajas:

  1. Aprendizaje social: La madre es la primera maestra del cachorro. Durante las primeras semanas de vida, los cachorros aprenden habilidades sociales cruciales al interactuar con su madre y sus hermanos. Aprenden a comunicarse, establecer jerarquías y a comportarse adecuadamente dentro del núcleo familiar.
  1. Nutrición y cuidado: La leche materna proporciona los nutrientes necesarios para el crecimiento saludable del cachorro. La madre también brinda cuidados básicos, como mantenerlos limpios y cálidos, lo que es crucial para su supervivencia, especialmente durante las primeras semanas de vida.
  1. Protección y seguridad: La madre protege a sus cachorros de posibles amenazas y les enseña a identificar y evitar peligros. Esta protección es esencial para los cachorros, que son vulnerables y dependientes al nacer.
  1. Desarrollo emocional: La presencia materna proporciona seguridad emocional a los cachorros, lo que les ayuda a desarrollar una base sólida para futuras interacciones sociales y emocionales. Los cachorros que tienen una crianza materna adecuada tienden a ser más equilibrados emocionalmente en la vida adulta.

Desventajas:

  1. Dependencia excesiva: Si un cachorro permanece con su madre durante demasiado tiempo, puede desarrollar una dependencia excesiva, lo que dificulta su capacidad para adaptarse a nuevas situaciones y entornos. Esto puede resultar en problemas de comportamiento en el futuro.
  2. Falta de socialización con humanos: Si los cachorros no tienen la oportunidad de interactuar con humanos durante sus primeras semanas de vida, pueden mostrar timidez o miedo hacia las personas en la adultez. La socialización temprana con humanos es crucial para que los perros se conviertan en compañeros seguros y amigables.

En última instancia, la separación de la madre y sus cachorros debe realizarse de manera cuidadosa y considerada, teniendo en cuenta el bienestar y las necesidades individuales de cada cachorro. 

Siempre es recomendable consultar con un experto en comportamiento de perros para obtener orientación específica sobre el momento adecuado para separar a la madre y sus cachorros, esto será algo que repercutirá para toda la vida en los futuros comportamientos de los perros.

¡Cualquier duda, puedes ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de intentar ayudarte!

mordiscos

CACHORROS, MORDISCOS Y DESTROZOS

Los cachorros de los 2 a los 3 meses aproximadamente pasan por una etapa que se caracteriza por el uso de la boca, normalmente mordiscos y destrozos.

El cachorro interactúa con las cosas que tiene a su alrededor, en su entorno más próximo. Es una etapa que muchas familias pasan con muchas molestias puesto que muchas de esas interacciones son mordiscos dirigidos hacia muebles o enseres de la casa y también hacia las personas que conviven con él.

A esta etapa se le denomina ETAPA BUCAL puesto que la mayor característica es que el cachorro comienza a descubrir el mundo que le rodea intercalando a través de la boca. En esta etapa los cachorros sienten la necesidad de morder las cosas que les rodean y además morder cosas vivas y en movimiento.

Si el cachorro en esta etapa no tiene la suerte de estar con su madre y sus hermanos de camada esos bocados irán todos dirigidos única y exclusivamente a las personas que convivan con él y si hay animales en el hogar con los que interactuar también se verán afectados por esta necesidad del cachorro. 

 

PRINCIPALES ERRORES A EVITAR MORDISCOS Y DESTROZOS EN ESTA ETAPA DE CACHORROS

– No dejarle cubrir esas necesidades por miedo a que lo haga siempre o se prolongue excesivamente en el tiempo. 

– Otro error sería desde el primer día repetirle constantemente la palabra “no” cada vez que intenta cubrir esta necesidad.

– No darle al cachorro cosas adecuadas para que pueda morder.

 

¿QUÉ PODEMOS HACER?

Lo primero es entender que cuanto más tranquilo se sienta el cachorro menos mordiscos habránn, en cantidad e intensidad. Esto es importante puesto que muchos cachorros sobreexcitados en casa, dejan de morder en cantidad e intensidad en cuanto se les aporta calma, se sienten más tranquilos y/o más seguros.

Lo segundo sería tratar de cubrir esa necesidad sin que el cachorro suba la intensidad. 

Para ello, tenemos que tener en que los mordiscos se dirigen por un lado a cosas que tiene cerca y por otro lado los dirigidos a nosotros, especialmente pies y manos.

 

MORDISCOS DIRIGIDOS HACIA FAMILIARES:

Lo ideal es no sobreexcitar al cachorro en este juego, cosa que hacemos involuntariamente en ocasiones moviendo la mano y gesticulando en exceso. Para ello podemos dejar la mano blanda, inmóvil sin hacer grandes aspavientos movimientos o usando la fuerza. De este modo suelen controlar bastante los mordiscos y aprenden mejor a regular su fuerza. En ocasiones si nos hace daño o nos molesta podemos comunicárselo y hacérselo saber con una comunicación respetuosa.

Si esto no funcionase podemos colocarnos en la mano un guante de cocina o jardinería, manoplas de este modo nos protegemos la mano durante esta etapa y nos permite cubrir esta necesidad que tienen sin frustraciones, enfados o castigos. Si estos mordiscos se dirigen hacia nuestros pies deberíamos protegerlos con calzado o calcetines, e intentar a través de nuestra interacción, no sobreexcitar al cachorro. Cubriendo esa necesidad con calma y en ocasiones poniendo nosotros fin a la sesión de mordiscos.

 

MORDISCOS DIRIGIDOS HACIA ENSERES DEL HOGAR:

Es vital que el cachorro tenga distintos objetos a su alcance, variados en texturas y durezas, siempre sin llegar a un nivel muy alto de dureza que pueda dañar su dentadura. Cosas naturales, peluches, algún juguete de cuerda, palo de olivo, una tela y alguno de plástico y siempre a ser posible bajo supervisión al principio para ver que no ingiere los trozos que ocasiona mordiendo. De este modo podemos cubrir esa necesidad de morder y descubrir cosas al mismo tiempo que evitamos destrozos indeseados en casa.

Son muchas las personas que tienen miedo de que estos bocados se prolonguen en el tiempo y no son pocos los profesionales que alimentan estos miedos proclamando mensajes ya muy anticuados como: “Si le dejas que te muerda puede convertirse en un perro agresivo” o “Si le dejas ahora morderte, lo hará toda la vida”. Pero la realidad no es esta en la inmensa mayoría de los casos.

La verdad es que si crecen equilibrados, dejan de hacerlo por el simple hecho de madurar adecuadamente. Del mismo modo que un niño deja de chuparse el dedo por el mero hecho de madurar. 

Un niño puede dejar de chuparse el dedo porque lo castigamos o porque madura y deja de hacerlo por sí mismo. Con los perros en esta etapa ocurre igual. Como siempre muchas veces lo que necesitan los perros es tiempo. Tiempo que las personas en ocasiones no tenemos o no queremos.

Sin lugar a dudas, el cachorro crecerá más equilibrado, madurará mejor, tendrá menos estrés, mayor bienestar y nosotros tendremos una mejor relación con él, si en lugar de educarlo con disciplina y exigencias, entendemos porqué hace las cosas y tratamos de cubrir sus necesidades de forma adecuada. Esto sobre todo cobra más relevancia si pensamos que es un animal de menos de 100 días y que lo que hagamos en estas primeras etapas puede marcar su personalidad de por vida.

¡Cualquier duda, puedes ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de intentar ayudarte!

descanso

LA IMPORTANCIA DEL DESCANSO EN LOS PERROS

El descanso es fundamental para todos los seres vivos, incluidos los perros. Al igual que los humanos, los perros necesitan períodos regulares de sueño para mantener un buen estado de salud y funcionamiento óptimo.

Cuando una familia tiene un bebe, la priorida maxima es el descanso del recien nacido. La casa esta adaptada para el descanso preparando un entorno muy tranquilo, con pocas luces, pocos ruidos ya que esto ayudara a mantener el descanso al máximo. La familia se comporta de manera muy tranquila, suele hablar en un tono bajo, intentan no montar muchos escandalos, ya que los primeros meses la importancia del descanso del recien nacido es muy importante.

Lamentablemente cuando llega un cachorro a una casa, normalmente se hace todo lo contraio, hay mucha excitación, muchos juegos, muchas ordenes y esto es lo que se le conoce como sobre estimulación temprana, que a la larga hara que ese cachorro descanse menos y el descanso sea peor.

El descanso adecuado es crucial para la salud y el bienestar de nuestros amigos caninos, ya que les permite recuperarse física y mentalmente, fortaleciendo su sistema inmunológico y contribuyendo a su felicidad y longevidad.

Los perros que de cachorro no pudieron descansar el tiempo necesario, normalmente son los perros que de adolescentes y de adultos, peor gestión hacen de las cosas del dia a dia, suelen ser perros con peor gestión emocional, mas nerviosos, incluso mas inseguros.

Aquí hay algunas razones clave por las que el descanso es esencial para los perros:

Recuperación Física:

Durante el día, cuando están despiertos los perros están activos, jugando, explorando y realizando actividades físicas. El descanso nocturno o los períodos de siesta les permiten recuperarse de estas actividades, reparar tejidos musculares y revitalizar su energía para el día siguiente.

Regulación del Estrés:

El descanso adecuado ayuda a los perros a regular su nivel de estrés. Al igual que los humanos, el sueño insuficiente puede aumentar los niveles de estrés en los perros, lo que puede llevar a problemas de comportamiento, ansiedad y otros trastornos.

Funcionamiento Cognitivo:

El sueño es crucial para el funcionamiento cognitivo de los perros. Durante el descanso, el cerebro procesa y consolida la información adquirida durante el día, lo que contribuye al aprendizaje, la memoria y la resolución de problemas.

Salud General:

El descanso adecuado es vital para la salud general de los perros. Un sueño insuficiente puede debilitar su sistema inmunológico, haciéndolos más susceptibles a enfermedades y trastornos de salud.

Los cachorros y los perros ancianos necesitan tener más momentos de descanso, que un perro adulto, y es crucial que los tutores fomenten que puedan tener la posibilidad de conseguir dormir más, ya que repercute en muchos aspectos como ya hemos visto.

Fases del Sueño en los Perros

Al igual que los humanos, los perros pasan por diferentes etapas del sueño, cada una con características distintivas. 

Comprender estas fases es fundamental para proporcionar un entorno de descanso adecuado para nuestros amigos peludos. A continuación, se describen las principales fases del sueño en los perros:

Fase de Sueño No REM (Rapid Eye Movement):

Esta fase inicial del sueño es caracterizada por un movimiento ocular mínimo y una actividad cerebral más lenta. Durante esta etapa, los perros experimentan un sueño ligero del que pueden despertar fácilmente. La fase de sueño No REM es importante para el descanso inicial y la relajación muscular.

Fase de Sueño REM (Rapid Eye Movement):

La fase de sueño REM es donde ocurre la mayoría de los sueños en los perros y sueñan con lo que han vivido, es decir, de las experiencias que han tenido.

Las experiencias que reviven en esta fase pueden ser positivas como negativas y es donde consolidan la memoria y el aprendizaje, para sus futuras experiencias. 

Durante esta etapa, los ojos de los perros se mueven rápidamente bajo los párpados, y la actividad cerebral es similar a cuando están despiertos. 

Los músculos de los perros están temporalmente paralizados durante esta fase para prevenir que actúen en sus sueños, lo que sugiere que están viviendo experiencias en sus sueños, al igual que los humanos.

En esta fase la temperatura corporal del perro disminuye como ahorro de energía, empiezan a liberarse hormonas y las células pueden empezar su reposición promoviendo su longevidad. 

Fase de Sueño Profundo:

Esta fase es la más reparadora para los perros. Durante el sueño profundo, el cuerpo y el cerebro se recuperan completamente. La respiración se vuelve más lenta y regular, y los perros son menos propensos a despertarse ante estímulos externos.

Fase de Despertar:

Al final de cada ciclo de sueño, los perros pueden pasar por una breve fase de despertar antes de volver a dormirse. 

Durante este tiempo, pueden cambiar de posición, estirarse o simplemente despertarse momentáneamente antes de volver a dormirse.

Cómo Mejorar el Descanso de los Perros

Para asegurar que nuestros amigos caninos disfruten de un descanso adecuado, es importante proporcionarles un entorno cómodo y seguro para dormir. 

Aquí hay algunas formas de mejorar el descanso de los perros:

  • Cama cómoda: Proporciona una cama suave y cómoda donde tu perro pueda descansar y relajarse.
  • Ambiente tranquilo: Crea un ambiente tranquilo y relajado en el área de descanso de tu perro, lejos del ruido y las distracciones.
  • Rutina de sueño: Establece una rutina regular de sueño y vigilia para tu perro, lo que ayuda a regular su reloj biológico y mejorar la calidad del sueño.
  • Ejercicio necesario: Asegúrate de que tu perro tenga la posibilidad de elegir si quiere hacer ejercicio durante el día, esto le ayudará a promover un sueño reparador por la noche.
  • Visitas al veterinario: Programa visitas regulares al veterinario para garantizar que tu perro esté en buena salud y abordar cualquier problema de sueño o comportamiento.

El descanso adecuado es esencial para la salud y el bienestar de los perros.

Proporcionar un entorno cómodo y seguro para dormir, así como establecer una rutina regular de sueño y vigilia, ayudará a garantizar que nuestros amigos peludos disfruten de un sueño reparador y revitalizante. 

Al comprender las diferentes fases del sueño en los perros, podemos mejorar su calidad de vida y fortalecer nuestro vínculo con ellos.

¡Cualquier duda, puedes ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de intentar ayudarte!

convivir con perros

CONVIVIR CON PERROS – VENTAJAS Y DESVENTAJAS

En esta redacción intentaremos explicar las ventajas y desventajas de convivir con perros en cada una de sus etapas.

La relación entre humanos y perros es una de las más antiguas y profundas que existen en el mundo animal. 

Desde la antigüedad,  los perros han sido considerados no solo como compañeros leales, sino también como miembros de la familia. 

Sin embargo, la experiencia de tener un 🐕 en casa varía significativamente a lo largo de su vida, desde su etapa de cachorro hasta su vejez. 

Etapa de cachorro – adolescencia

Ventajas:

  • Vínculo emocional: La etapa de cachorro es el momento en que se establece un fuerte vínculo emocional entre el perro y su tutor. Esta es una época llena de ternura, juegos y momentos adorables que pueden unir aún más a la familia.
  • Educación y aprendizaje: Los cachorros son altamente receptivos en esta etapa, lo que hagamos repercutirá en su futuro y para bien o para mal permite moldear su comportamiento de manera efectiva. Esta es una buena oportunidad para aplicar una educación basada en el respeto y la empatía, erradicando la educación autoritaria basada en los castigos. Sus habilidades básicas y socialización dependen de las experiencias vividas en esta etapa.
  • Energía contagiosa: Los cachorros suelen tener una energía contagiosa que puede animar el ambiente en casa. Su curiosidad y alegría pueden traer una sensación de vitalidad y diversión a la vida diaria.

Desventajas:

  • Requieren mucho tiempo y atención: Los cachorros necesitan atención constante y supervisión. Esto puede ser agotador para la familia, especialmente aquellas con horarios ocupados.
  • Destrucción y accidentes: Los cachorros tienden a morder, arañar y explorar su entorno de manera desordenada, lo que puede resultar en daños en la propiedad y accidentes domésticos, de ahí la supervisión y que la casa debería de estar preparada para el perro joven, al igual que haríamos con la llegada de un bebe a casa, delimitando zonas y dejando fuera de su alcance los objetos de gran valor.
  • Necesidades de salud: Los cachorros requieren una serie de cuidados de salud, como vacunas, desparasitación y visitas regulares al veterinario, lo que puede suponer un gasto adicional, a parte de una alimentación sana, de calidad y variada, no vale con darle toda la vida pienso, porque como ya sabemos  la ingesta diaria de alimento ultra procesado no sería lo más recomendable.

Etapa adulta en perros

Ventajas:

  • Estabilidad y rutina: Los perros adultos suelen haber establecido una rutina y comportamiento más predecible. Esto puede brindar estabilidad y tranquilidad a los tutores.
  • Complicidad desarrollada: Durante la etapa adulta, los perros y sus familias suelen haber desarrollado un vínculo sólido y una comprensión mutua. Esto puede traducirse en una relación más armoniosa y gratificante.
  • Menos necesidades de entrenamiento: Aunque la capacitación continua es importante, los perros adultos suelen necesitar menos supervisión y atención que los cachorros.

Desventajas:

  • Problemas de salud relacionados con la edad: A medida que los perros envejecen, pueden desarrollar una variedad de problemas de salud, como artritis, pérdida de audición o visión, y enfermedades crónicas. Esto puede requerir cuidados médicos adicionales y suponer un gasto económico.
  • Reducción de la actividad física: Con la edad, muchos perros experimentan una reducción en su nivel de energía y actividad física. Esto puede significar menos juegos y ejercicio, lo que puede afectar su salud y bienestar.
  • Ajuste a nuevas situaciones: Los perros adultos pueden tener dificultades para adaptarse a cambios en su entorno, como la llegada de un nuevo miembro de la familia o mudarse a un nuevo hogar.

Etapa de vejez en perros

Ventajas:

  • Calma y tranquilidad: El perro anciano suele ser más tranquilo y relajado que en etapas anteriores de su vida. Esto puede crear un ambiente más pacífico en el hogar.
  • Vínculo profundo: En la vejez, el vínculo entre los perros y sus familias puede profundizar aún más. Los tutores a menudo experimentan un sentido de gratitud y conexión emocional más fuerte con su compañero canino.
  • Apreciación del tiempo juntos: A medida que los perros envejecen, los tutores pueden valorar aún más cada momento compartido. Esto puede llevar a una mayor apreciación de los pequeños placeres de la vida cotidiana.

Desventajas:

  • Problemas de salud crónicos: Los perros ancianos son más propensos a desarrollar problemas de salud crónicos, como enfermedades cardíacas, diabetes y cáncer. El manejo de estas condiciones puede ser complejo y costoso.
  • Disminución de la movilidad: Con la edad, muchos perros experimentan una disminución en su movilidad y capacidad para realizar actividades físicas. Esto puede afectar su calidad de vida y requerir ajustes en el hogar.
  • Luto anticipado: La vejez de los perros puede llevar a sus familias humana a enfrentarse al doloroso proceso de aceptar su mortalidad y prepararse para su eventual pérdida. Este aspecto emocional puede ser difícil de manejar.

Convivir con perros desde su etapa de cachorro hasta su vejez es una experiencia enriquecedora que viene acompañada de una variedad de ventajas y desventajas. 

Desde la ternura y la alegría de la infancia hasta la tranquilidad y la profundidad emocional de la vejez, cada etapa ofrece su propio conjunto de desafíos y recompensas. 

Sin importar la etapa de la vida en que se encuentre, la relación entre los perros y sus familias es una fuente inagotable de amor, compañerismo y conexión emocional.

Por último, pero no por eso es menos importante, algo que es innegociable desde la llegada de un perro a su nuevo hogar, sea la etapa que sea, es la necesidad de invertir tiempo, tiempo de calidad, y es algo que en muchos casos, no se tiene en cuenta.

Convivir con perros te cambia los horarios, las rutinas, la economía, las preferencias o capacidades a la hora de viajar o de afrontar cualquier cambio en la vida familiar y todo esto se debe de tener en cuenta antes de tomar la decisión de incluir a un perro en nuestra vida, para luego no llevarse sorpresas y que lo acabe pagando el pobre animal, ya que no fue él el que decidió convivir con nosotros.

No podemos responsabilizar a los perros y que luego paguen las consecuencias con abandonos o cualquier fechoría.. los perros son para toda la vida 💚🐶💚

¡Cualquier duda, puedes ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de intentar ayudarte!

perro anciano

PERRO ANCIANO – CAMBIOS FÍSICOS, COGNITIVOS Y NECESIDADES

En esta redacción, nos centraremos en la etapa del perro anciano, explorando sus cambios físicos, cognitivos y sus cambiantes necesidades.

Los perros, son los mejores amigos del hombre, eso está fuera de toda discusión, comparten con nosotros una conexión, un vínculo, una relación que trasciende el tiempo. 

Desde la etapa de cachorros siendo juguetones con hasta la etapa geriátrica siendo leales compañeros, los perros experimentan una evolución física y cognitiva notable a lo largo de sus vidas. 

1. La Transición de perro adulto a perro anciano:

A medida que los perros envejecen, experimentan una serie de cambios tanto internos como externos. 

La transición de perro adulto a perro anciano suele comenzar alrededor de los 7 años en perros de tamaño mediano a grande, mientras que los perros más pequeños pueden considerarse ancianos a partir de los 9 o 10 años. 

Este proceso varía según la raza y el tamaño del perro.

1.1 Cambios Físicos:

  • Pérdida de elasticidad en la piel y pelaje: El pelaje del perro anciano puede volverse más opaco y frágil, y la piel menos elástica, lo que hace que los perros sean más propensos a la sequedad y las irritaciones cutáneas.
  • Disminución de la masa muscular: Los músculos del perro anciano pueden comenzar a debilitarse debido a la disminución de la actividad física y a la pérdida de densidad ósea.
  • Problemas dentales: La acumulación de placa y sarro es común en perros ancianos, lo que puede llevar a enfermedades dentales y pérdida de dientes.
  • Pérdida de audición y vista: Al igual que los humanos, el perro anciano puede experimentar pérdida de audición y visión debido al envejecimiento de los órganos sensoriales.

Estos cambios físicos, pueden darse de manera más rápida o lenta dependiendo de muchos factores, como alimentación, actividad física, genéticas, ambientales… 

1.2 Cambios Cognitivos:

  • Declive cognitivo: El perro anciano puede experimentar cambios en su capacidad cognitiva, como desorientación, pérdida de memoria y cambios en el comportamiento.
  • Mayor propensión a la ansiedad: El perro anciano puede volverse más ansioso, especialmente si experimenta cambios en su entorno o en la rutina familiar.
  • Disminución del umbral de paciencia: La tolerancia a la frustración puede disminuir en el perro anciano, lo que puede manifestarse en cambios en su comportamiento, como irritabilidad o agresividad.

2. Cambios en las Necesidades y Cuidados:

Al igual que pasa con un cachorro, que sus necesidades y capacidades son distintas a cuando son perros adultos, con la llegada de la vejez, el perro anciano requiere una atención y cuidado específicos para garantizar su bienestar y calidad de vida.

2.1 Necesidades Nutricionales:

  • Dietas especiales: El perro anciano puede necesitar dietas especiales que se adapten a sus necesidades nutricionales cambiantes, como alimentos bajos en calorías, proteínas de alta calidad, grasas saludables, fibra, antioxidantes como vitamina C y E, y nutrientes como calcio y fósforo para mantener la salud ósea. 
  • Control del peso: Es importante controlar el peso del perro anciano para prevenir el sobrepeso u obesidad, lo que puede agravar problemas de salud como la artritis o la diabetes.
  • Aportes naturales que ayudan a desinflamar también son una buena opción

2.2 Ejercicio y Actividad Física:

  • Ejercicio moderado a su realidad: Aunque la actividad física sigue siendo importante para el perro anciano, es crucial adaptarla a su capacidad y estado de salud. Caminatas cortas y suaves son ideales para mantener la movilidad y el bienestar general.
  • Fisioterapia y rehabilitación: En casos de problemas musculoesqueléticos, la fisioterapia y la rehabilitación pueden ser beneficiosas para mejorar la movilidad y reducir el dolor.

2.3 Atención Médica y Veterinaria:

  • Exámenes de salud regulares: El perro anciano debería de someterse a exámenes de salud regulares para detectar tempranamente problemas de salud y enfermedades relacionadas con la vejez, como la enfermedad cardíaca o renal.
  • Control del dolor: Es importante controlar el dolor en el perro anciano, ya sea a través de medicamentos recetados por el veterinario o mediante terapias alternativas como la acupuntura, la fisioterapia, hidroterapia , etc..  

3. Consejos para el Cuidado del Perro Anciano:

  • Proporcionar un entorno cómodo y seguro, con acceso fácil a agua fresca y lugares cálidos para descansar.
  • Mantener una rutina regular de ejercicio no inducido y actividad física adaptada a las capacidades del perro.
  • Proporcionar una dieta equilibrada y adecuada a las necesidades nutricionales del perro anciano.
  • Estimular mentalmente al perro con juegos y actividades que promuevan la cognición y el bienestar emocional.
  • Proporcionar atención veterinaria regular y estar atento a cualquier signo de enfermedad o malestar, observando cualquier cambio en su comportamiento, puede ser una señal de alguna dolencia o problema médico.
  • Contacto y cariño de calidad.
  • Que se respete su criterio. Su voluntad, sus gustos, intereses.
  • Respetar sus tiempos. Bajan muchísimo de ritmo para todo. No hacen las cosas al mismo ritmo y sobre todo se nota en los paseos. Meterle prisas es de lo peor que podemos hacer por ellos.

En conclusión, la vejez es una etapa natural en la vida de los perros, y con el cuidado adecuado, podemos garantizar que disfruten de una vida cómoda y feliz en sus años dorados. 

Es importante estar atentos a los cambios físicos y cognitivos de nuestros amigos peludos y adaptar nuestro cuidado en consecuencia, brindándoles el amor y la atención que merecen en todas las etapas de sus vidas.

¡Cualquier duda, puedes ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de intentar ayudarte!